EL TRIUNVIRATO UNIVERSITARIO

En medio del júbilo por la ascensión formal de Sara Ladrón de Guevara a la rectoría de la Universidad Veracruzana, no pasó desapercibido el hecho de que las otras dos posiciones principales en el gobierno de la casa de estudios también se les otorgaron a mujeres.

Leticia Rodríguez Audirac es la nueva secretaria académica y Clementina Guerrero García, la titular de la cartera de Administración y Finanzas de la Universidad.

De inmediato se habló del “empoderamiento” de las mujeres como el signo con el que arranca el rectorado de Sara Ladrón de Guevara, siendo ella misma la primera mujer en dirigir a la institución. Y no faltó el medio de comunicación que, con un inocultable talante machista y misógino, consideró que se les había “pasado la mano” al concentrar todo el poder de la UV en tres representantes del género femenino.

Leticia Rodríguez Audirac contendió en el proceso por la rectoría que recién concluyó. Es licenciada en Pedagogía con especialidad en desarrollo grupal, y cuenta con una maestría en Administración de Organizaciones Educativas.

Ha sido profesora de la facultad de Pedagogía, coordinadora académica en la Dirección General del Área Académica Económico Administrativa, coordinadora Académica en la Secretaría Académica, directora del área de Formación Básica General, coordinadora General del Modelo Educativo Integral y Flexible, directora General de Desarrollo Académico, y de 2010 a la fecha se desempeñó como secretaria de la Rectoría. Éste último cargo le ha valido ser tachada como “posición” del ex rector Raúl Arias Lovillo.

La contadora Clementina Guerrero García, según se consigna en una publicación de la UV, “fue la primera mujer en detentar un puesto de alta jerarquía en 1971. En 1973 asumió la jefatura del primer departamento de control presupuestal, fue directora de integración y modificación presupuestal; bajo la dirección del rector Roberto Bravo Garzón le correspondió elaborar los proyectos de creación de varias entidades y dependencias de los campus".

“Siendo rector Emilio Gidi Villarreal fundó la Contraloría General de la UV. Ha sido investigadora de tiempo completo del Instituto de Investigaciones y Estudios Superiores de Ciencias Administrativas, así como catedrática en las maestrías de Ciencias Administrativas y Contabilidad y Gestión Gubernamental”. Actualmente fungía como contralora general de la Universidad.

Lo cierto es que el reto para ellas es mayúsculo. Tendrán que demostrar que están ahí no por una cuestión de género o un supuesto “complot mujeril”, sino por su capacidad para resolver los enormes problemas de una institución del tamaño de la UV, que alberga a más de 60 mil estudiantes y tiene necesidad de aumentar su matrícula, su presupuesto depende del estado y la federación, y enfrenta grandes rezagos en su infraestructura.

Merecimientos académicos y curriculares no les faltan a ninguna de ellas. Esperemos que arrestos tampoco, porque seguramente se les exigirá más que si fueran varones.

Es el momento de las mujeres en la Universidad Veracruzana.

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