LA SALUD DE FIDEL

Expectativa causó la información circulada en redes sociales acerca de que el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán se encontraba delicado de salud, tras una nueva intervención quirúrgica en su mandíbula y los maxilares.

Incluso, socarrona y maliciosamente se mencionó en esa información, difundida por un portal de Internet y hasta periodistas de medios nacionales, que su esposa, Rosa Borunda de Herrera, se encontraba “recogiendo” los bienes de Herrera en manos de amigos y supuestos prestanombres, pues, según esto, su estado de salud “no presagia un futuro nada alentador”.

Pero fue el mismo ex mandatario quien de manera personal, en llamada telefónica a un noticiero radiofónico, desmintió los rumores sobre la supuesta gravedad de su estado físico, aunque confirmó que, en efecto, le practicaron una nueva operación, la quinta, el 3 de abril pasado, para continuar con el tratamiento al que se somete para restablecer, según sus propias palabras, toda la parte ósea de su cara.

Herrera se declaró “en perfecto estado de salud física, mental y política. A la mejor esta última es la que le inquieta a algunos”.

Y no le faltaría razón a Fidel Herrera al hacer la última acotación. El panorama electoral que el PRI tiene frente a sí en Veracruz es por demás complicado. Varios connotados –y también los no tan connotados– priistas dan por perdidos varios municipios y distritos, ante lo débil de las postulaciones tricolores, o bien por las divisiones que causarán en la militancia las imposiciones de personajes sin arraigo en las demarcaciones en disputa, pero que eso sí, tienen buenos y encumbrados padrinos.

Así que de la posibilidad de que el político oriundo de Nopaltepec esté en condiciones físicas óptimas para operar la elección y hasta incorporarse personalmente a las campañas, depende en buena parte la suerte que corra el PRI el 7 de julio, pues a pesar de todo, Fidel Herrera mantiene un nivel de popularidad alto entre los veracruzanos.

Por ende, su estado de salud siempre será noticioso. Y ahora que los ánimos políticos están al rojo vivo, no deberá extrañarnos ver correr todo tipo de rumores e infamias, de ida y vuelta, entre los actores de la elección, de aquí al día de los comicios.

Los “demócratas” azules

Contrario a su propio discurso antes de la elección interna panista, ahora varios precandidatos perdedores alegan irregularidades como acarreo, compra y coacción del voto por parte de quienes los vencieron en las urnas.

¿No que eran un partido demócrata?

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