LA IGLESIA ENTRA A LAS CAMPAÑAS
Fuerte
comunicado emitieron este domingo los obispos de las 10 diócesis del estado, en
el que llaman a los ciudadanos a participar libremente en las elecciones del 7
de julio, y a los partidos a conducirse dentro de la legalidad durante las
campañas y el día de los comicios.
El
mensaje de los obispos no deja títere con cabeza. A los candidatos les pide
“plataformas claras y coherentes”. A los partidos, “que presenten a sus mejores
candidatos y eviten campañas costosas”. A los órganos electorales,
“transparencia e imparcialidad”. Hasta a los medios de comunicación exige
“verdad y equidad”. Peticiones con mucha jiribilla, pues en buena medida se
carece de todo ello.
Y
fueron más allá. Los obispos advierten que “el voto personal, libre, razonado y
secreto es insustituible. Es un derecho y un deber moral de todo ciudadano. Por
ello debemos fortalecer el voto de cada ciudadano, que no se compra ni se
vende, ni se consigue a través de sobornos o amenazas. Todo lo que constituya
una forma fraudulenta de obtener el voto, es un delito y constituye una falta
moral grave, pues se manipula a la persona, hiriendo su dignidad, tanto más
cuando se especula con la pobreza o la ignorancia de la gente sencilla”.
El
párrafo anterior es sin duda una referencia directa al escándalo de la red
electoral para uso de los programas sociales federales que se pretendía
establecer en Veracruz, y que le costó sus cargos al ahora ex secretario de
Finanzas Salvador Manzur, al ex delegado de Sedesol Ranulfo Márquez, y a una
cincuentena más de funcionarios implicados. Incluso, los obispos se congratulan
por el “adéndum” al Pacto por México para blindar los programas sociales
durante las campañas, signado precisamente a raíz de los hechos en Veracruz.
Aprovechando
el viaje, la jerarquía católica veracruzana introdujo su agenda propia en sus
peticiones de campaña, al demandar a los candidatos a las diputaciones locales
que den a conocer “sus convicciones y criterios personales o de partido, en
torno a las posibles propuestas legislativas que esperan emprender. Sería un
fuerte agravio a la democracia representativa, si los ciudadanos fuesen
sorprendidos o traicionados por la actuación de sus representantes con leyes
contrarias al sentir y los valores del pueblo, como son el derecho fundamental
a la vida –desde su inicio hasta su término natural–, el valor de la familia y
el matrimonio, la salud integral de la población, especialmente la de los
jóvenes y niños; la impartición de la justicia y la protección al Estado de
Derecho, la dignidad de los migrantes y la libertad religiosa”.
Es
innegable que la Iglesia Católica
juega un rol político aún muy poderoso en México. Así que no es de extrañar que
en época electoral se incorpore a la arena política, aunque sea en una supuesta
calidad de espectador.
Lo
que se manifiesta en el mensaje de los obispos debiera ser atendible en lo
general. Pero al mismo tiempo, habrá que pedir congruencia al clero. Porque hay
muchos sacerdotes a quienes les encanta codearse con la clase gobernante, hayan
llegado como hayan llegado al poder.
Email: aureliocontreras@gmail.com
Twitter: @yeyocontreras
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