PLANCHANDO A LOS PRIISTAS
El PRI está allanando el
terreno para que la definición de sus candidaturas a las alcaldías y
diputaciones locales no se le salga de control.
En ese contexto pueden verse
las “reuniones de amigos” y de la “unidad priista” que este fin de semana se
llevaron a cabo en las ciudades de Coatzacoalcos y Córdoba. Ambos actos
políticos fueron la antesala del anuncio de quiénes serán los personajes que
representen al Revolucionario Institucional en la contienda, en la víspera del
arranque de los procesos internos, que en la mayoría de los casos, serán de
mero trámite en este partido, pues la decisión ya estaría tomada de antemano.
A pesar de ello, existen
resistencias dentro del priismo en varias zonas del Estado para aceptar y
apoyar a quienes serán los ungidos, por lo que estas demostraciones públicas
buscarían bajar la presión y tender puentes de negociación. Los priistas saben
que divididos, pierden las elecciones. Así que les conviene más llegar a
acuerdos.
Es el caso de Coatzacoalcos.
El diputado federal Joaquín Caballero Rosiñol despunta como el más probable
candidato a la alcaldía, pese a la oposición del actual presidente municipal,
Marcos Theurel Cotero. Empero, el apoyo del grupo de Carlos Brito y Ramón
Hernández Toledo, así como el del empresario Tony Macías Yazegey, serán
suficientes para que Caballero sea postulado.
En Córdoba, aunque todo
apunta a que el candidato tricolor a suceder a Francisco Portilla Bonilla en el
palacio municipal será Marco Antonio Aguilar Yunes, otros políticos como el
rector de la Universidad
Tecnológica del Centro de Veracruz, Francisco Rangel Cáceres,
o hasta el empresario Martín Becerra, se sienten con merecimientos para
disputar la nominación. O al menos para hacerse presentes y lograr que algo les
toque, apelando al viejo sistema de recompensas con el que el PRI mantuvo sus
equilibrios por muchas décadas.
En el caso de las
diputaciones, la decisión es más delicada aún. Lanzar candidatos cuyas
posibilidades de triunfo sean inciertas sería una apuesta suicida para un
gobierno que está por llegar apenas a la mitad de su gestión.
Como decíamos al principio,
muchas de las candidaturas del PRI ya están definidas y no se esperan grandes
sorpresas o cambios. Sin embargo, el manejo de los malestares y rencores que
estas decisiones provoquen será el verdadero reto del PRI, que no puede darse
el lujo de un descalabro en Veracruz en las primeras elecciones locales tras el
proceso federal del año pasado. Bastante tuvieron con perder la elección de
Enrique Peña Nieto en la entidad.
Email: aureliocontreras@gmail.com
Twitter:
@yeyocontreras
Comentarios
Publicar un comentario