AUTORITARISMO RAMPANTE
Fotografía: Yerania Rolón |
A quienes conocieron de primera mano las formas de ejercer el poder de Miguel Ángel Yunes Linares en el pasado, cuando era todopoderoso secretario de Gobierno en el sexenio del salinista Patricio Chirinos Calero, no les sorprenden en absoluto los desplantes autoritarios que realiza ahora como gobernador del estado de Veracruz.
Durante su corto tiempo como mandatario,
Yunes Linares ha dado muestra fehaciente de ser completamente intolerante a la
crítica y al disenso, a los que responde casi siempre con insultos, amenazas y,
cada que le es posible, a través del uso de la fuerza.
En varias ocasiones ha amenazado con proceder
judicialmente contra medios de comunicación que publican información que le
desagrada o lo exhibe, ya sea directamente o a través de sus subalternos, a
quienes ordena asumir como suyas incendiarias cartas aclaratorias que no
podrían haber sido redactadas más que por él mismo.
Con los adversarios políticos es lo mismo. En
lugar de ocuparse por gobernar un estado en ruinas como Veracruz, Miguel Ángel
Yunes pierde su tiempo atacando candidatos, presidentes municipales y
legisladores de otros partidos que no doblan la cerviz ante él, a diferencia de
otros a los que tiene tomados por el cuello con la amenaza de llevarlos a la
cárcel.
Enemigo del derecho de libre manifestación,
Yunes Linares reprime las marchas que demandan atención del gobierno que
encabeza. Pero permite, si no es que alienta, los bloqueos que van dirigidos a
las autoridades políticas a las que busca desacreditar y desgastar.
La tarde de este martes, un grupo de
habitantes de un fraccionamiento residencial de la zona que se conoce como la
“Riviera veracruzana”, perteneciente al municipio de Alvarado y colindante con
el de Boca del Río, realizó una protesta luego de que policías estatales y
municipales tomaron la caseta de vigilancia y derribaron plumas y bardas, en
medio de un conflicto entre particulares por el acceso a esos desarrollos
inmobiliarios, de muy alta plusvalía.
A pesar de que consta en varios videos cómo
los vecinos inconformes dialogaron de manera civilizada con los empleados de la
Dirección de Política Regional de la Secretaría de Gobierno, a quienes se
solicitó la presencia del presidente municipal de Alvarado, el “verdecologista”
Bogar Ruiz, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares dio la orden de arremeter
en su contra.
“Giré instrucciones de dialogar; sin embargo,
después de un largo rato no aceptaron levantar el bloqueo, que deriva del
cumplimiento de una orden judicial, de un tema que corresponde al Ayuntamiento
de Alvarado. Ante la negativa de levantar el bloqueo, ordené que éste fuera
retirado y que fueran detenidas las personas responsables del mismo”, dijo
Yunes Linares a través de un comunicado oficial.
Y los policías así lo hicieron. Procedieron a
la detención de personas que buscaban que su entorno habitacional y familiar no
fuera vulnerado. Y lo hicieron con lujo de fuerza.
Entre los manifestantes y detenidos se
encuentra el periodista Rogerio Pano Rebolledo, por muchos años conductor
estelar de noticieros de Televisa Veracruz, lo cual dio mucho mayor notoriedad
a la arbitraria actuación de la policía estatal, que comenzó a ser profusamente
exhibida en redes sociales.
Yunes Linares también tuvo tiempo de mandar
un mensaje en su boletín al periodista que defendía sus derechos como
ciudadano, sin ostentaciones ni “charolas” de por medio: “no podemos volver a
la etapa del desorden, en Veracruz se aplica la Ley a todas las personas por
igual, no importando a qué se dediquen”, sostuvo.
Pero al parecer sí importó la condición de
periodista de Rogerio Pano. Tras ser liberado al cabo de un rato, la policía lo
detuvo por segunda ocasión y lo internó en un centro de reclusión preventiva
conocido como “El penalito”, donde permanecía al momento de redactarse estas
líneas, después de las 10 de la noche.
Y así, mientras la policía estatal acomete contra
ciudadanos con demandas legítimas y el gobernador se entretiene haciendo
campaña para heredarle la gubernatura a su hijo, Veracruz sigue hundiéndose en
una espiral de violencia y ausencia de oportunidades, aderezada con un
autoritarismo rampante que reprime a la menor provocación.
Vaya cambio.
Email: aureliocontreras@gmail.com
Twitter: @yeyocontreras
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