INSEGURIDAD: DE LA LEY DE LA SELVA A LA LEY DE HERODES
Es una cantaleta de nunca acabar hablar de la inseguridad
que priva en Veracruz. Pero también es imperioso no dejar de señalarlo, pues
las autoridades desinforman, cuando no mienten descaradamente, sobre lo que en
realidad sucede en el estado y en la mayoría de sus ciudades.
En los últimos días hemos visto casi con indiferencia, de
tan comunes que se han vuelto, notas periodísticas que dan cuenta de una gran
cantidad de hechos delictivos a lo largo de la entidad veracruzana, que las más
de las veces terminan en tragedias. Secuestros, asaltos, agresiones de diversa
índole.
Todo esto pasa mientras los funcionarios gubernamentales,
como el secretario de Seguridad Pública estatal Arturo Bermúdez Zurita, y hasta
uno que otro burócrata de medio pelo, cuentan con ostentosos aparatos de
seguridad, con guaruras armados que cruzan las calles con cartucho cortado y
apuntando a la población.
A la vez, la población vive con miedo de salir a la
calle, de dejar sola su casa, de ir a trabajar o a comprar la despensa. En
cualquier hora del día, en cualquier lugar, existe un peligro latente de ser
atacado por algún delincuente. Total, la autoridad es omisa y está más preocupada
por perseguir borrachines los fines de semana que por vigilar que los
ciudadanos de bien puedan vivir en paz.
Hace poco más de una semana, en este espacio nos
solidarizamos con la periodista Yamiri Rodríguez, cuya casa fue allanada, por
segunda ocasión en menos de tres meses, por “ladrones” que no se llevaron nada
de ahí. Hoy volvemos a alzar la voz por la reportera Hylcia Trujano, quien
resultó gravemente herida por asaltantes que se introdujeron en su vivienda la
madrugada de este lunes.
Todo parece indicar que se trató de un asalto común y no
de una agresión a Hylcia en su calidad de profesional de la información. Pero
ello no le quita un ápice de gravedad al ataque que sufrió al intentar defender
a su familia y su patrimonio de los criminales, pues recibió sendas heridas con
un arma punzocortante que de milagro no le costaron la vida.
Por tratarse de una trabajadora de los medios de
comunicación, la agresión a Hylcia Trujano recibió amplia cobertura mediática y
hasta mereció que el gobernador Javier Duarte se presentara la mañana de este
lunes en el Centro de Especialidades Médicas de la capital del estado para
visitar a la comunicadora y conocer su estado de salud, que se reporta como
delicado.
¿Cuántas visitas a hospitales, centros de salud y hasta
salas funerarias tendría que hacer el mandatario estatal para confortar a todas
las víctimas de la violencia y la inseguridad que no tienen el privilegio de pertenecer
a un medio? ¿Cuántas voces se han perdido en la indiferencia y la frialdad de
las estadísticas sobre la inseguridad en Veracruz? ¿Cuántos llantos se han
ahogado en el dolor de la impunidad, porque las autoridades son omisas, cuando
no cómplices, de los delitos que se cometen?
Y no se ve para cuándo esto pueda cambiar. Arturo
Bermúdez no será relevado de su cargo en lo que resta de este sexenio, su jefe
ya se manifestó en ese sentido. Bueno, si se pasaron por el “arco del triunfo” la
inhabilitación que la Secretaría de la Función Pública emitió en contra del
subsecretario de Seguridad Pública “B” estatal, Federico Rivas Valdés, pues qué
más podemos esperar.
¿Con qué cara se puede presentar en Veracruz este
miércoles el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, cuando desde
la Federación han permitido que en Veracruz impere la ley de la selva?
O lo que es peor: la ley de Herodes.
Email: aureliocontreras@gmail.com
Twitter: @yeyocontreras
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