ELECCIONES: NUEVOS ESCENARIOS
Más
les valdrá a los actores políticos que pretenden acudir a las urnas el año que
entra ponerse al tanto de las nuevas disposiciones legales bajo las que tendrán
que competir, pues las reglas del juego y los escenarios de contienda en 2015
serán muy distintos a los que están acostumbrados.
El
primer gran cambio lo supone la creación del Instituto Nacional Electoral
(INE), que sustituirá al agonizante IFE y contará con atribuciones
sensiblemente mayores para arbitrar los procesos electorales, entre éstas, las
que tienen que ver con la fiscalización de los gastos de los partidos.
La
reforma política aprobada en el Congreso de la Unión le otorga al INE la
facultad de revisar las cuentas de los partidos y sus candidatos sin estar
limitado por los secretos bancario, fiduciario y fiscal. Si esto se aplica como
se debe, supondría el fin de muchas de las chapucerías en las que incurren los
políticos para “pasarse por las armas” los topes de campaña o para desviar los
recursos públicos de las dependencias gubernamentales en aras de proyectos
políticos personales, como es evidente que sucede, por ejemplo, en alguna que
otra secretaría de gobierno de Veracruz.
Una
revisión escrupulosa e imparcial de los gastos que desde ahora ciertos
funcionarios veracruzanos de baja estatura política, moral y hasta física
realizan para operación en tierra y medios de comunicación, con la finalidad de
autopromoverse en los distritos donde aspiran contender por una diputación,
podría costarles no sólo la candidatura, sino hasta ir a la cárcel. Si de
verdad le dan esos dientes al INE, como se espera, muchos sueños guajiros se
irían al caño, que es a donde en realidad pertenecen.
En
ese mismo canal está la iniciativa que el propio presidente Enrique Peña Nieto
envió al Senado de la República para que una elección sea anulada en caso de
que un partido o candidato adquiera cobertura fuera de los espacios y tiempos
de radio y televisión regulados por las autoridades electorales. Conocida es la
práctica de los políticos, en contubernio con los medios, de inducir
gacetillas, que no es sino propaganda disfrazada de información. A ver hasta
dónde se atreven a ir.
Otro
cambio fundamental y obligatorio será la postulación de mujeres en la mitad de
las candidaturas de cada uno de los partidos políticos. No es para nada algo
sencillo. Y no porque no haya mujeres capaces, sino porque prácticamente
ninguno de los partidos políticos se ha preparado al cien por ciento para ello.
Algunos ni siquiera tienen el suficiente número de militantes femeninas para
cumplir con esta disposición. Si con la cuota de 30 por ciento sufrieron, con
la de 50 van a darse de topes contra la pared.
Y
lo más importante. Los candidatos tendrán que decirle y ofrecerle algo
sustancioso a la gente. Las promesas y engañifas de siempre cada vez funcionan
menos. Y aunque no es la panacea por sí misma, la figura de las candidaturas
ciudadanas, que ya está contemplada en la nueva reglamentación electoral, le
dará batalla y muchos dolores de cabeza a los políticos tradicionales, que
creen que siguen en los años 70 del siglo pasado.
Si
no lo cree, pregúntele al “candigato Morris”, que con una campaña con propuesta
ciudadana y sin presupuesto, consiguió más votos que muchos partidos en las
elecciones locales de 2013, lo que le valió ganar dos Victory Awards, por
“Innovador Político del Año” y “Mejor campaña para medios online”. Esto,
aplicado en una candidatura legalmente reconocida, significaría veneno puro
para los partidos.
Estos
son algunos de los nuevos escenarios. Ya veremos quiénes tienen la capacidad de
moverse en ellos. Los que no, que vayan de una vez pensando en dedicarse a otra cosa.
Email: aureliocontreras@gmail.com
Twitter: @yeyocontreras
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