EL ÚLTIMO ASIDERO DEL PRD

Tras la asonada que depuso de la dirigencia estatal del Partido de la Revolución Democrática a Juan Vergel, y entregó este instituto político a los intereses del PRI para impedir una coalición opositora en el proceso electoral en curso, el sol azteca se apagó en Veracruz. Se desfondó.
Los cuadros importantes, fundadores, que aún le quedaban al PRD, se fueron a apoyar a otros candidatos o de plano renunciaron y concentran sus energías en la constitución del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) como partido político.
Ello fue claro a la hora de definir las candidaturas a las alcaldías y diputaciones locales. La “dirigencia” encabezada por Sergio Rodríguez Cortés no encontraba con quién cubrirlas en todo el estado, así que en la gran mayoría de los municipios postularon prácticamente a quién se dejó, y por consiguiente, se trata de candidaturas débiles y condenadas al fracaso más estrepitoso.
Es el caso, por ejemplo, de Xalapa. Antes de que iniciara el proceso electoral, el perredismo tenía una muy alta expectativa de levantarse con la victoria, gracias a la inercia que aún existía por el resultado del año pasado, cuando en la elección federal arrasó. Pero tras la conversión al “PRD rojo”, y la entrega de la candidatura a Marcos Salas Contreras, sus posibilidades se esfumaron. Tanto así, que se rumora con insistencia que éste estaría por declinar, de hecho o de facto, en favor del candidato del PRI, Américo Zúñiga.
El único municipio importante donde el PRD postuló a un candidato competitivo es, paradójicamente, uno en el que nunca había figurado: Veracruz. Ahí, la candidatura de Julio Saldaña ha prendido de tal manera, que sus adversarios en el PRI y en el PAN ven como un serio riesgo la posibilidad de perder ante el ex diputado local y federal, que ha decidido quemar sus naves para hacer realidad su aspiración de ser alcalde del puerto, misma que dice le arrebataron a la mala en la pasada elección municipal.
En la dirigencia nacional perredista están conscientes de que Julio Saldaña no es un candidato testimonial y que puede dar el campanazo que detenga la debacle de este partido en la entidad. Así que por eso Veracruz ha sido el municipio en el que han concentrado sus recursos y energías y al que más han visitado gente como el presidente del partido, Jesús Zambrano, o más recientemente el ex senador y actual secretario del Trabajo del Gobierno del Distrito Federal, Carlos Navarrete.
La candidatura de Julio Saldaña le puso sabor a una contienda que se pretendía fuera sólo entre dos, y ha crecido de tal manera que muchos de sus ex compañeros en el PAN están abandonando el barco del insufrible y déspota Rafael Acosta Croda para apoyarlo.
La única vez que el PRD logró algo en el puerto de Veracruz fue en la década de los 90, hace casi 20 años, cuando la conductora radiofónica Socorro Aubry ganó la diputación federal. Hoy con Julio Saldaña pelea palmo a palmo la alcaldía. Es éste, probablemente, su último asidero político en el estado.


Twitter: @yeyocontreras

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