SU PEOR PESADILLA
Fotografía: tomada de La Silla Rota |
Cuando
en Casa Veracruz decidieron impulsar el crecimiento del Movimiento de
Regeneración Nacional en el estado para desdibujar -aún más- al PRD, jamás
pensaron que, como ya lo sentenciamos antes, en ese circo fueran a crecer los
enanos al grado de transformarse en las fieras que están por devorar a sus
domadores.
La
estrategia pulverizadora del voto opositor diseñada por los “operadores” del
gobierno de Javier Duarte de Ochoa falló a todas luces. Por un lado, tiraron
miserablemente el dinero financiando candidatos de utilería que nunca crecieron
lo suficiente como para representar un factor de competencia en la contienda. Y
en contraparte, crearon un “Frankenstein” que se ha vuelto contra ellos.
Las
últimas encuestas dadas a conocer en diferentes medios de comunicación de la
Ciudad de México tienen un punto en común: un triple empate técnico entre los
candidatos de la coalición priista, del PAN-PRD y de Morena. Con el agravante
de que el único con posibilidades de crecer todavía, de aquí al 5 de junio, es
el tercero, a través de un mercado potencial enorme entre los indecisos, cuyo
porcentaje, en promedio, oscila entre 20 y 30 por ciento. Suficiente para
inclinar la balanza.
En
Morena, tanto su líder Andrés Manuel López Obrador como su candidato Cuitláhuac
García niegan haber pactado con el gobernador Javier Duarte. Pero lo que es un
hecho innegable es que aprovecharon el escenario que les prepararon, se
montaron en la campaña de lodo para desinflar al candidato que arrancó a la
delantera las campañas y ahora están en la antesala de ganar la gubernatura de
Veracruz. Algo que ni siquiera habrían podido soñar hace un año.
Muy
tarde se dieron cuenta en el equipo de Héctor Yunes de la traición que se
fraguaba en Casa Veracruz. Y en el círculo de Javier Duarte, ya se han percatado
también de que están en la mira del gobierno federal y de última hora intentan
revertir el daño que ellos mismos se causaron.
Corre
la versión de una supuesta llamada desde Bucareli a Casa Veracruz en la que se
le habría advertido a su todavía inquilino que habían tomado nota del apoyo
oficial a Morena, y que si el partido del enemigo del Presidente ganaba la
elección en la entidad, se atuviera a las consecuencias. En la PGR tienen esperando
unas denuncias por desvío de recursos federales que pueden ser reactivadas en
cualquier momento.
Por
eso en los últimos días de la campaña se intensificaron los ataques contra
Cuitláhuac García promovidos desde el gobierno estatal, de la misma manera como
lo hicieron antes con Miguel Ángel Yunes Linares, pero sin lograr el mismo
efecto. Como dice el abanderado de Morena, no tiene cola que le pisen. O al
menos, no es tan larga como la de sus adversarios.
Al
régimen aún le queda un último pero poderoso recurso para buscar ganar la
contienda: la “movilización” de su estructura electoral el día de los comicios
con todo el poder y todos los recursos que aún le quedan al gobierno estatal, y
con la cual le intentarán arrancar la victoria, al precio que sea, a Morena y a
la coalición PAN-PRD.
Ya
veremos el próximo domingo si les alcanzó para remontar, o si los duartistas
están a punto de enfrentarse a su peor pesadilla.
Email:
aureliocontreras@gmail.com
Twitter:
@yeyocontreras
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