EL INNOMBRABLE COLORADO

Pancho Colorado y Fidel Herrera (Foto: Reforma)

Más de un político veracruzano está temblando por el proceso que se le sigue al empresario veracruzano Francisco Colorado Cessa en una corte de Texas, que lo encontró culpable de los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada, y lo sentenció a 20 años de prisión.

Y deben estar temblando porque aunque ahora lo nieguen una, dos o diez veces, varios encumbrados políticos se relacionaron e hicieron negocios con Colorado Cessa, de cuyos vínculos con los cárteles del narcotráfico se hablaba someramente desde al menos hace unos diez años.

A “Pancho” Colorado se le relaciona con el crimen organizado a través de la compra de caballos de carreras con dinero ilícito, proveído por José Treviño Morales, hermano de uno de los líderes del cártel de los Zetas, y quien también está preso y condenado en una cárcel texana luego de su detención el año pasado.

Habría que recordar que la espiral de violencia en Veracruz comenzó, precisamente, con una carrera de caballos. La famosa carrera en la congregación de Villarín, municipio de Veracruz, en marzo de 2007, en la que fue ejecutado durante una balacera uno de los líderes del cártel de los Zetas. A partir de eso, comenzó la oleada de ajustes de cuentas que por años asoló al estado.

Bien dicen que el dinero no tiene color ni ideología. Colorado Cessa tenía amigos tanto en el PRI como en el PAN y hasta en el PRD (su hermano Miguel fue candidato de los dos últimos). Su empresa ADT Petroservicios ganó contratos millonarios como proveedora de Pemex durante el gobierno de Felipe Calderón, y en la investigación que se le sigue en la corte estadounidense se le mencionó como presunto propietario del lujoso hotel Isla Tajín, ubicado en Tuxpan, y que los últimos años ha sido la sede de importantes eventos y reuniones en la zona norte del estado.

Durante el proceso salieron a relucir, para variar, los nombres de los dos políticos que se pelean a muerte el poder en Veracruz desde hace años: Fidel Herrera y Miguel Ángel Yunes.

El primero fue señalado de presuntamente haber recibido financiamiento de Colorado Cessa para su campaña a la gubernatura en 2004. Al segundo se le vincula por supuestamente haber gestionado que el narcoempresario prestara su avión particular para las giras de Josefina Vázquez Mota a la entidad durante la campaña presidencial de 2012.

Obviamente, ambos han negado vínculo alguno con “Pancho” Colorado, y se acusan mutuamente de estar detrás de esos señalamientos. Aunque de ambos hay fotos con el empresario hoy caído en desgracia.

Ya se verá qué fue lo que Francisco Colorado “cantó” como las golondrinas ante el jurado norteamericano. Por lo pronto, se ha vuelto innombrable para los políticos veracruzanos.

 

En la primera imagen, Pancho Colorado y Miguel Ángel Yunes. En la segunda, Yunes levanta la mano de Miguel Colorado (Foto: Reporte Índigo)

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