COLORADO: TODOS ADENTRO
De qué
tamaño debe ser el temor a que el “efecto Colorado” hunda a buena parte de la
alta clase política veracruzana, que el tema es una brasa ardiente que nadie
quiere que le pongan en las manos.
Qué tan
fuertes pueden ser las repercusiones de que se lleguen a probar nexos con el
empresario preso en Texas por lavado de dinero del narcotráfico, que el ex
gobernador Fidel Herrera Beltrán abandonó el bajo perfil mediático que mantenía
y concedió una entrevista al periodista Ciro Gómez Leyva en vivo en su
noticiario radiofónico matutino para deslindarse de Colorado Cessa, en
respuesta a los señalamientos que un día antes hizo en ese mismo espacio Miguel
Ángel Yunes Linares, quien a su vez, de paso, también se desmarcó de vínculos
con el “innombrable” veracruzano.
Sin
embargo, más allá del intercambio de diatribas entre estos personajes de la
picaresca jarocha, en torno de quienes gira la política veracruzana de los
últimos 15 años a través del odio personal que ambos se profesan, lo que queda
de manifiesto es que toda la clase política de este estado, en mayor o menor
medida, ha tenido que ver con el polémico Colorado o con su familia.
Como lo
mencionamos en esta columna hace unos días, desde el inicio mismo de su
sexenio, Herrera Beltrán ha sido vinculado con “Pancho” Colorado. No es ni
siquiera una novedad. Sólo que ahora que el ex contratista de Pemex y
aficionado a los caballos pura sangre ha sido condenado en una Corte
norteamericana a 20 años de prisión, el agua le llegó hasta al cuello a todos
los políticos que, directamente o indirectamente, recibieron “apoyos” del antes
adorado y hoy defenestrado hombre de “negocios”.
Miguel
Ángel Yunes ya aceptó –y no podría no hacerlo, porque fue público- que apoyó la
candidatura por el PAN a una diputación federal de Miguel Colorado Cessa,
hermano de Francisco, y quien antes ya la había buscado como abanderado del
PRD. Y aun cuando las responsabilidades legales no son imputables por vía
consanguínea, el vínculo existe.
El mismo
gobernador Javier Duarte no puede negar que conoce a Francisco Colorado, tanto
por las mismas declaraciones de éste admitiendo que apoyó su campaña a la
gubernatura, aunque sea con su “confianza” y su “voto”, como por las fotografías
en las que aparecen juntos durante el periplo de 2010 y que circulan
profusamente por la red.
Incluso,
el hermano de un alto funcionario de la actual administración estatal que tiene
la pretensión de suceder a Javier Duarte en la gubernatura funge, hasta la
fecha, como apoderado legal de la empresa ADT Servicios, propiedad de Colorado,
que fue la gran contratista de Pemex durante el sexenio del panista Felipe
Calderón Hinojosa. ¿Eso lo hace un delincuente? Ciertamente no. Pero sí echa
abajo el discurso de que nadie conoce a este hombre.
Si
Francisco Colorado apoyó con recursos materiales y económicos las campañas a la
gubernatura de Herrera y Duarte sería algo que tendría que investigar la
Procuraduría General de la República y deslindar responsabilidades si hubiera
dinero del narcotráfico involucrado. Mientras tanto, todo se queda al nivel de
la acusación y el round político-mediático con que estos
personajes nos “deleitan” desde hace varios años.
Pero de
que todos están adentro, lo están.
Email: aureliocontreras@gmail.com
Twitter:
@yeyocontreras
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